Jueves, 18 de Enero de 1940

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FINLANDIA: En el norte del Ladoga, los finlandeses siguen estrechando el cerco de la 168ª División Soviética en Pikaranta. Aun así, los finlandeses deben darse prisa: los reconocimientos aéreos detectan nuevas divisiones soviéticas que se aproximan al sector. En el norte, 4 batallones fineses lanzan un asalto contra Märkäjärvi, pero los defensores, de la 122ª División Soviética, resisten el ataque. En el frente aéreo, la aviación soviética bombardea el puerto de Kotka: el rompehielos Tarmo es destruido y 39 marineros finlandeses mueren durante la incursión. En el plano internacional, el Parlamente de Suecia debate hoy la petición de ayuda para Finlandia. En la calle el sentimiento popular es unánime. Finlands Ak Är Var, la Causa de Finlandia es la Nuestra, reza el lema adoptado hoy del movimiento popular sueco a favor de su vecino.

Simo Häyhä (1905-2002), francotirador finlandés que se hizo famoso por estas fechas en el sector del Lago Ladoga. Se ganaría el apodo de "La muerte blanca" gracias a su buena puntería y a su rifle M-28. Más de 540 soldados soviéticos morirían en las manos de este pequeño leñador.


GRAN BRETAÑA: En la enorme factoría de explosivos Waltham Abbey, una serie de explosiones ocasionan graves daños a la fábrica y acaban con la vida de cinco empleados. Pese a que el suceso resulta confuso, las autoridades culpan de las explosiones a saboteadores nazis. Mientras, el Almirantazgo ordena la construcción del denominado dispositivo doble L. Este ingenio consiste en un conjunto de cables y baterías que van montados en los barcos y que detonan las minas magnéticas a su alrededor. El aparato es un tremendo éxito: en cinco meses detonarán 300 minas, marcando el inicio del final de la amenaza de las minas magnéticas.


VARSOVIA: En la antigua capital polaca, la GESTAPO nazi detiene al líder opositor Andrzej Kott, católico pero de orígenes judíos y uno de los primeros cabecillas de la resistencia polaca. En represalia a sus orígenes hebreos, la GESTAPO manda detener a 250 judíos y las SS los fusilan en un bosque a las afueras de la ciudad.

1 comentarios:

José Luis de la Mata Sacristán dijo...

Se les acabó el chollo de las minas a los alemanes...

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