En el momento de la invasión comunista, la Línea estaba inacabada, y solo cuenta con 101 búnkeres preparados para el combate. En inferioridad numérica, las tácticas finlandesas serán la clave para la defensa de la Línea y de otros frentes. En concreto, los finlandeses atacan las formaciones blindadas rusas para alejarlas de su infantería; por la noche, los soldados fineses atacan por sorpresa a la desprotegida infantería valiéndose de su conocimiento del terreno y su superior movilidad. Estas tácticas provocan fuertes bajas a los soviéticos (los finlandeses afirman haber destruido 80 carros rusos en estos primeros cinco días de contienda), y cuando se apliquen a gran escala darán como resultado humillantes derrotas a los rusos. En otro orden de cosas, hoy un grupo de bombarderos finlandeses Blenheim de fabricación británica bombardean la base naval soviética de Murmansk. Se desconoce el saldo de víctimas o daños. Será uno de los pocos ataques aéreos que la Fuerza Aérea Finlandesa lance sobre territorio de la URSS.
MOSCÚ: El gobierno soviético rechaza una propuesta realizada por la Sociedad de Naciones para decretar un alto el fuego. En lugar de ello, la URSS afirma que solo reconoce como legítimo gobierno finlandés al gobierno comunista de Kuusinen.
LONDRES: En un discurso en la Cámara de los Comunes, Winston Churchill, Primer Lord del Almirantazgo, afirma en referencia al uso de las minas magnéticas que “Alemania ha descendido a la forma más baja de hacer la guerra que se podría imaginar”. Según Churchill, los alemanes pasaron de los cañones a los torpedos, y de estos a las minas.
2 comentarios:
Buena observacion la de Churchill.
Y que lastima que los rusos no aceptaran el alto el fuego, aunque pienso que de poco hubiera servido ya, en el punto en el que estaban las cosas.
Feliz dia, monsieur
Bisous
ya empieza a ponerse interesante la guerra de invierno...
Publicar un comentario